Ruta por el impresionante macizo kárstico de la Sierra de Juan Diego con subida al pico Ventana (1298 m.). Partimos de Montejaque hacia la parte alta del pueblo donde está situado el Mirador del Karst. Desde allí nos dirigimos hacia los cortados de la vetiente SW de la sierra para asomarnos a la "ventana" que le da nombre al pico y luego abordar la cima (1298 m.) situada unos 300 m al SW. El descenso lo hacemos hasta el abandonado cortijo del Pozuelo y el Llano Bartolomé. Ahora el sendero transcurre en suave descenso hacia Benaoján por el Rodadero. Si aquí no hemos dejado algunos coches toca andar 2 km por el arcén de la carretera hasta llegar de nuevo a Montejaque.
CARACTERÍSTICAS
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| Fecha | Octubre 2015 |
| Ubicación | Parque Natural Sierra de Grazalema |
| Pueblos cercanos | Montejaque, Benaoján (Málaga) |
| Distancia aprox. | 15,2 Km. |
| Tiempo aprox. | 8 horas (paradas incluidas) |
| Alturas / desnivel | Mínima: 620. m - Máxima: 1298 m. (pico Ventana) - Desnivel: 678 m. |
| Dificultad | Media |
| Trazado | Circular |
| Track | Descargar aquí |
El punto de partida es en la explanada situada junto al cementerio de Montejaque y donde parte el camino a la Ermita de la Escarihuela.
Allí coincidimos con nuestros amigos y compañeros de Pasos Largos que participaban en la III Ruta Arriera (Montejaque - Grazalema).
Ilse y Herminia
Montejaque y la Sierra de Juan Diego. El pico Ventana queda a la izquierda.
Montejaque, cuyo nombre, Monte-Xaquez significa "montaña perdida", es de origen árabe. Esta Villa swe halla rodeada de una abrupta orografía montañosa que la sitúa a 687 m. de altitud sobre el nivel de mar. Hubo durante esta época una alcazaba medieval que daba una visión de gran parte de la Serranía. Durante la ocupación árabe Montejaque gozó de una notable importancia. Esta construcción desapareció completamente, quedando sólo su nombre en la Finca El Castillo.
Tras la reconquista a manos de los Reyes Católicos a finales del siglo XV, el pueblo fue entregado al Conde de Benavente al cual nombraron Señor de Montejaque y Benaoján dejando de pertenecer a los arrabales de Ronda.
Durante la Guerra de la Independencia contra los franceses, el guerrillero José Aguilar sostuvo un enfrentamiento contra las tropas napoleónicas en el puente del río Gaduares o Campobuche el 20 de octubre de 1810; en esta contienda participaron hombres de Montejaque, Benaoján, Atajate, Cortes de la Frontera y Jimera del Líbar, sólo eran 250 personas en contra de casi 700 soldados franceses, a pesar de la inferioridad numérica salieron victoriosos. Esse lugar es conocido como "El Puente".
El Lavadero de Fuente Vieja.
Centro de Interpretación de la Espeleología (recomiendo su visita).
Continuamos por el pueblo y pasamos junto a la Fuente Nueva.
Desde los lejanos tiempos de la Rebelión Morisca (año de 1500) estas tierras fueron testigo de la acción de muchos montejaqueños, deseosos de liberarse de toda clase de opresión, ya fuera religiosa, política o social.
Nombres como los de Fransico de Quexí, José Aguilar, o de aquellos otros que por aquí anduvieron: Omar ben Hafsún, José maría "El Tempranillo" o "Pasos Largos" resuenan aun en la memoria popular con claras connotaciones de coraje, valentía y generosidad. Unas veces lucharon contra los castellanos; otras, contra los invasores franceses; contra las ideas absolutistas o, simplemente, mirando por la propia supervivencia.
En época reciente, finalizada la Guerra Civil, anduvo por estas sierras una partida guerrillera capitaneada por Bernabé López Calle (Comandante Abril), claro exponente de la indomable voluntad de servicio a su legalidad y a los propios ideales. Muchos fueron, con el, los que perdieron la vida en el monte.
Subimos al Mirador del Karst.
La montaña que vemos al otro lado del pueblo es el Hacho de Montejaque.
Desde el mirador nos adentramos en la Sierra de Juan Diego por el paraje del Canchuelo.
La Era de la Niña Chica.
La Era del Espinal.
Majanos de piedra. Antiguamente los campesinos amontonaban las piedras sueltas para ganar terreno donde poder cultivar los cereales que luego trillaban en las eras.
Subimos hacia el Tajo Fuerte.
Posaderos de buitres en los paredones del Tajo Fuerte.
Otra era.
Y continuamos subiendo.
Y llegamos a la meseta kárstica de "El Solitario" (1044 m).
A la izquierda queda la Sierra de Montalate, en el centro el Hacho de Montejaque y la derecha el cerro Tavizna y la Sierra del Algarrobo.
Al fondo tenemos el Pico Ventana.
Ahora toca bajar por el otro lado.
Continuamos por la depresión kárstica del Hoyo de la Terrona.
A nuestra derecha podemos disfrutar de las vistas del Karst del Romanadero.
La palabra karst proviene de Carso o Kras, región italo-eslovena cuya morfología se caracteriza por los relieves de las abundantes rocas. Se usa para referirse a un terreno formado por rocas carbonatadas, en el que la acción disolvente del agua ha creado formas muy características. El proceso de disolución recibe el nombre de karstificación: el anhídrido carbónico de la atmósfera se combina con el agua de lluvia para formar el ácido carbónico. Este ataca al carbonato cálcico y produce una disolución de las calizas por su zona de mayor debilidad originando distintos tipos de relieves. Esta acción es favorecida si presentan grietas (diaclasas) para poder infiltrarse y continuar su acción disolvente. Estos relieves pueden ser exokársticos como los lapiaces, dolinas, uvalas y poljés, ó endokársticos como las simas y cuevas. La arcilla procedente de la descalcificación, llamada "terra rossa" (tierra roja) queda libre y se deposita en las zonas bajas del relieve.
La Tortuga de la Sierra de Juan Diego.
Continuamos por el Hoyo de la Cebada.
Donde veremos alguna que otra era a nuestra izquierda.
Las "Cobachas de los Rojos".
Una vista atrás.
Continuamos subiendo.
Damos algún que otro rodeo para aproximarnos al torcal.
Ronda.
El único obstáculo.
Nuestro camino gira en dirección sur hacia el Pico Ventana.
Nos acercamos a ver la Sima de la Ventana. Tiene una caída en vertical de 45 metros.
Continuamos por los cortados de la vertiente SW de la sierra donde existe una grieta o "ventana" que le da nombre al pico.
Muy cerca hay otra "ventana".
Subimos al cordal y cresteamos un poco.
Cima del pico Ventana (1.298 m.)
El día no era precisamente el ideal para hacer fotos paisajísticas. La cordal continua en dirección SW por el Tajo de los Pajarones y las siguientes elevaciones serían el Conio, Palo y Martín Gil. Abajo a la izquierda quedaría el Llano Bartolomé y del Pozuelo de Banaoján. Arriba destaca el Alto del Conio. A la derecha tenemos abajo el camino de los Llanos de Líbar y los Llanos del Pozuelo de Montejaque que nos separan de la Sierra de Mojón Alto.
Al NE vemos Montejaque.
Al este quedaría Ronda.
Ronda
Sierra de las Nieves y Torrecilla.
Al SE el Alto del Conio.
Al SW los Llanos de Líbar. Vemos las siluetas de la Sierra de los Pinos, Salamadre y Puntal de la Raya.
Llano del Pozuelo de Montejaque y el cerro Mojón Alto.
Al E y NE destaca en primer plano el cerro de los Frailecillos. Mas lejanas quedan la Sierra del Endrinal, Sierra del Caillo y Sierra del Pinar.
Al norte nos aproximamos con el zoom a los Tajos Lagarín y Grajas a la izquierda y el Cerro Malaver a la derecha.
Comenzamos a bajar.
Y el descenso lo hacemos en dirección este desde el Picacho de los Pajarones. Otros compañeros continúan por la "escalereta.
Acabamos en el llano de Bartolomé.
La era del Cortijo del Pozuelo.
Desde la era vemos las "ventanas". La cima es la segunda por la izquierda.
Continuamos en suave descenso hacia Benaoján por la ladera de Lucas.
Y llegamos al pueblo por el paraje del Rodadero (por aquí rodaban las rocas).
Como nuestra intención era prolongar la ruta unos 11 km por otros caminos hasta Montejaque no dejamos ningún coche en Benanoján. Pero llegamos escasos de tiempo al pueblo y decidimos acortar por la carretera andando los 2 km que nos separan. A nuestra derecha queda la Sierra del Algarrobo. A la izquierda asoma el cerro Tavizna.
Mapa del recorrido.
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