La ruta comienza en el Puerto de los Majanos de la Sierra de las Viñas. Desde allí realizaremos una travesía hasta el comienzo de la Manga, en el Cintillo, visitando los aljibes de la zona y pasando por las cumbres del Chaparral, Saltillo y Atochar.
Nos acompañará nuestro amigo y bloguero José Luis Valencia, Selu, un gran conocedor del entorno de Villaluenga del Rosario, cuyas experiencias va dejando reflejadas en su blog Cuaderno de Campo Payoyo, de obligada lectura para todos lo que queremos conocer dicho entorno.
CARACTERÍSTICAS DE LA RUTA
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Fecha | Diciembre 2011 |
Localización | Villaluenga del Rosario y Benaocaz (Cádiz). Parque Natural Sierra de Grazalema. |
Localidades cercanas | Villaluenga del Rosario, Benaocaz, Ubrique |
Distancia | 11 Km |
Trazado | Lineal |
Finaliza | En el área recreativa del Cintillo |
Dificultad | Media - Alta |
Desniveles | Altura mínima: 712 m. Altura máxima: 1162 m. |
Permisos | No |
Track | Descargar aquí |
Antes del punto de comienzo de nuestro recorrido, a unos 400 metros, podemos acercarnos a ver esta construcción que es conocida como Pozo del Callejón, aunque en el cartel reza como Pozo del Arrabal. A la derecha vemos el cerro del Chaparral, la primera cumbre a la que subiremos.
Está construido por ladrillos de barro, cuenta con un aljibe interior interior y está cerrado por una bóveda. Por la puerta se extrae el agua con ayuda de un cubo y se vierte en las pilas que son aprovechadas, fundamentalmente, como abrevaderos para el ganado.
Comienza la ruta en plena Manga de Villaluenga, en una pista hormigonada que nos llevará al puerto de los Majanos del Aguilar. Aquí se encuentra un panel explicativo de la Manga como vía de comunicación y otro sobre rutas ornitológicas.
Pasaremos por una cancela y una angarillla. Dejaremos atrás unas cabrerizas y llegamos al puerto de los Majanos del Aguilar. Detrás, al otro lado de la Manga vemos el Navazo Alto, la máxima altura de la Sierra del Caillo.
Bajamos hacia un valle donde se encuentra el primer aljibe.
Los dos primeros que veremos son conocidos como los aljibes del Chaparral, así que llamaremos a éste el aljibe del Chaparral bajo.
Nos acercamos para verlo mejor.
A pesar de su estado el aljibe aun se sigue aprovechando para abastecer de agua al ganado.
En la parte trasera podemos podemos ver dos regueras que encauzan el agua de la lluvia aprovechando la leve inclinación del terreno.
La cuenca de captación del agua comienza en la ladera del monte.
El agua encauzada pasa por un primer sumidero hacia la poza de decantación.
Aquí vemos mejor la poza de decantación que, como su nombre indica, sirve para que se decante el lodo que lleva el agua antes de entrar por un segundo sumidero al interior del aljibe.
Aquí vemos la pared del interior del aljibe y el orificio por el que sale el agua que llega del exterior a través del sumidero.
El aljibe está cerrado por una bóveda hecha de ladrillos de barro y que llegó a estar cubierta por una capa de argamasa de la que muy poco queda.
La cúpula por dentro
Poco tiempo después de realizar la ruta, un seguidor del blog, Manuel González B., estuvo por allí y vió que lo estaban restaurando. Le agradezco haberme enviado la foto.
Continuamos el camino en dirección al segundo aljibe.
En esta zona se encuentra el yacimiento paleontológico de la Sierra del Chaparral. Fue descubierto en Febrero de 2009 por el espeleólogo Diego Mendoza López que localizó un conjunto de huesos fosilizados.
Abajo a nuestra izquierda vemos el aljibe que hemos visitado.
Llegamos al otro aljibe, el del Chaparral alto, también en uso para la ganadería.
El interior del aljibe se encuentra bien conservado. En las paredes podemos ver los orificios de entrada del agua del exterior.
El aljibe restaurado pocos días después de realizar la ruta.
Foto cedida por Manuel González B.
Estuvimos intentado localizar el/los regueros que encauzan el agua de la lluvia al interior del aljibe, pero solo era visible esta hilera de piedras que podría corresponder a uno. En el caso que lo sea, se puede comprobar por su estado que actualmente no cumple su función. Los sumideros que deben coincidir con los orificios que vimos en el interior del aljibe tampoco son visibles. Entonces ¿como se abastece de agua?
A escasa distancia del aljibe se encuentra la Casa del Chaparral, al pie del cerro que lleva su mismo nombre.
Nos acercamos a ella y encontramos un curioso sistema de recogida del agua de lluvia que cae desde el tejado a una canaleta. También se puede ver en el suelo un canal empedrado que luego desaparece. Quizás este canal ó reguero encauzara años atrás el agua hasta el aljibe situado más abajo.
El agua que recoge la canaleta de la parte trasera es dirigida por una tubería hacia la parte delantera de la casa y hacia abajo.
En la fachada delantera también encontramos el mismo sistema de recogida del agua del tejado, que a través de una manguera se dirige al suelo.
La manguera surge de nuevo cerca del aljibe y a través del murete de piedra se adentra en la pared del aljibe. Este es el sistema por el que actualmente se surte de agua el aljibe.
Comenzamos la subida hacia el Cerro del Chaparral. A partir de aquí el resto de la ruta transcurre sin sendero por las distintas cumbres hasta llegar a los cortados del Saltadero donde enlazaremos con el Sendero de los Contrabandistas que baja hacia el Cintillo. Abajo vemos la casa del Chaparral. El aljibe queda semioculto.
Desde aquí vemos el primer aljibe del Chaparral.
Llegamos a la cima del Chaparral (1.159 m.)
Al este vemos la Sierra de Líbar, Mojón Alto, Cancha Bermeja y Los Lajares.
Al SE el Puntal de la Raya y detrás el pico Sierra de los Pinos, debajo queda la Garganta de Barrida.
Al sur el Peñón de Gibraltar.
Descendemos por la ladera occidental del Chaparral y nos dirigimos al Saltillo, la máxima elevación de estas sierras (1.162 m.).
Cruzamos un encinar entre lapiaces.
Y comenzamos la subida al Saltillo.
Una vista atrás para ver el cerro del Chaparral.
Vamos ganando altura y comenzamos a ver Villaluenga del Rosario.
El Palo, la máxima altura del Macizo de Líbar.
Llegamos a un muro de piedras que marca la linde entre los términos de Villaluenga y Benaocaz. Al fondo vemos el Cao ó Navazo Alto, la máxima altura de la Sierra del Caillo.
Continuamos un poco por la linde en dirección sur.
Y nos situamos en la cima del Saltillo (1.162 m.). Estamos en el punto mas elevado de esta cadena montañosa. Al fondo vemos la silueta del Peñón de Gibraltar.
Con el zoom podemos ver el Peñón de Gibraltar, la Bahía de Algeciras y las montañas del Rif africano.
Ahora continuamos por el cordal del Saltillo en dirección norte hacia la siguiente elevación (1.146 m.) y que también se conoce con el mismo nombre, aunque la máxima elevación está donde nos encontramos ahora.
Nos aproximamos a los cortados de la Manga.
Plataformas de rocas calizas forman en algunos puntos miradores naturales.
Villaluenga del Rosario
Al norte la campiña. Por encima del pico del Higuerón y mas lejanos vemos Bornos y su embalse.
Detrás vemos la máxima elevación del Saltillo, donde acabamos de estar y la linde.
Continuamos hacia la siguiente elevación que tenemos frente a nosotros (1.143 m). La otra que hay detrás es el cerro del Atochar (1.146 m.) al que también iremos.
Llegamos al siguiente cerro y nos llama la atención un muro de piedra que constituye un estratégico puesto de vigía de toda la manga.
Desde este punto se controla todo el paso por la Manga.
Situada entre las sierras del Caillo al norte y la de Ubrique, Atochar y Chaparral al sur, la Manga de Villaluenga es una depresión kárstica estrecha y alargada que forma un largo canalón sinclinal y corredor de seis km de largo. Sus paredes están formadas por calizas jurásicas muy erosionadas y karstificadas, con formas de disolución visibles (lapiaces). El fondo está labrado sobre margocalizas cretácicas, que favorecen el desarrollo de una buena cobertera vegetal.
Este paso estrecho comunica las vertientes atlántica y mediterránea de las Subbéticas Occidentales. Su gran importancia estratégica como vía de comunicación y paso natural entre la Sierra de Cádiz y la Serranía de Ronda, comunicando los valles de los rios Guadiaro y Guadalete ha hecho que por aquí pasara el camino que enlazaba Saepo, al sur de Ubrique, y Acinipo (Ronda la Vieja), así como la vía romana (que hoy yace bajo la actual carretera) y que llevaría de Ocuri (Ubrique) a Lacíbula (Grazalema). A partir de la época medieval también unía los principales pueblos de la comarca, además de ser un importante itinerario de gran tránsito ganadero.
También se controla la otra mitad de la Manga hacia Ubrique.
Al fondo y con el zoom vemos el área recreativa del Cintillo, final de la ruta y donde dejamos aparcado uno de los dos coches.
En primer plano a la izquierda el cerro del Atochar. A la derecha más lejana la Sierra de la Silla y debajo el Salto de la Mora donde se encuentra la ciudad ibero-romana de Ocuri.
Bajamos por el lapiaz de la otra ladera hacia el valle.
En el valle se encuentra el aljibe de la Magdalena.
Llegamos al aljibe de la Magadalena. También vemos el cerro del Atochar donde iremos después.
Por el estado de deterioro que presenta, posiblemente el aljibe está abandonado a su suerte y sin ningún uso en la actualidad.
Los tres pilones aun se conservan en buen estado.
El muro está muy deteriorado y las tejas se están desprendiendo.
Junto al pilón podemos ver el sumidero de entrada del agua, pero no encontramos por los alrededores restos de la reguera o canal que encauza el agua de la lluvia.
Aquí vemos mas cerca el sumidero por el que el agua de la lluvia pasa al interior del aljibe.
En una visita posterior, pudimos observar que la hierba había dejado muy bien marcada la reguera que estuvimos buscando.
En la pared del interior del aljibe vemos el orificio con una teja por la que cae el agua que llega del exterior.
A un nivel superior, en el lado opuesto hay otro orificio de entrada de agua, posiblemente la que recogía procedente del tejado y desviada por un canalón hasta aquí, aunque no encontramos restos de este sistema.
En un lateral se encuentra una ventana por la que se vierte el agua que va a parar a los pilones.
Mas abajo, donde está el cubo, hay otra abertura que comunica con un canalizo que hay en la base de los pilones.
Posiblemente la función de este canalizo era la de facilitar el acceso al agua a los animales mas pequeños. Este aljibe es una maravilla y merece ser restaurado y figurar en la base de datos del Patrimonio Inmueble de Andalucía del IAPH (Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico).
Dejamos atrás el aljibe de la Magadalena y comenzamos la subida hacia la cumbre del Atochar.
Las vistas también son impresionantes. Vamos dejando la Sierra del Caillo a nuestra derecha, lo cual nos permite ver las sierras más lejanas. A la izquierda asoma un poco Benaocaz.
En primer plano el pico del Cintillo, en el extremo SW de la Sierra del Caillo, detrás vemos la Sierra del Endrinal y al fondo la Sierra del Pinar con el Torreón, la máxima cota del Parque y de la provincia de Cádiz.
Aun no hemos llegado a la cima del Atochar. Nos queda crestear un poco.
Y ahora sí estamos en la cima.
Sierra Alta y detrás el valle del Tavizna y el cerro Albarracín.
La Sierra de la Silla y el Salto de la Mora.
La Sierra de los Pinos. A la derecha en el horizonte la silueta del Hacho de Gaucín.
Ahora bajamos por la cara SW del Atochar.
Y llegamos a un rincón en el que merece la pena pararnos un rato.
En una pequeña terraza sobre la roca caliza se encuentra este pozo con una barandilla. Es de suponer que recibe el agua de la lluvia que corre por las paredes de la laja. También se puede ver un surco o canal que desciende hacia el pozo. No sabemos si producido por la erosión del agua o por la mano del hombre.
A escasos metros del pozo y a un nivel inferior se encuentra esta pequeña alberca o estanque.
Por la ubicación del estanque y el surco que vemos arriba, es de suponer que recibe el agua de la lluvia de la terraza superior y también del propio pozo si éste se desborda. Si nos asomamos un poco también se aprecia que recibe filtraciones del interior de la cavidad.
A continuación y con pequeño desnivel se sitúa uno de los dos pilones.
Visto desde otro ángulo se puede apreciar mejor una muesca tallada en el borde de la cara distal.
Un poco más abajo se sitúa un segundo pilón. Podemos ver como tiene tallados dos escalones en un extremo.
Los dos pilones vistos desde la terraza superior donde se encuentra el pozo. Podemos apreciar una hilera de piedras que va desde el estanque hasta el segundo pilón.
Y ahora viene mi teoría, quizás algo disparatada: en época de lluvias cuando el pozo se desborda, el agua cae hacia el estanque situado más abajo y luego, aprovechando la inclinación del terreno, sería desviada hacia los dos pilones mediante hileras de piedras, motivo por el que el primero de ellos tiene una muesca sobre el reborde. Hay que dar por supuesto que también usarían el cubo para llenarlos a mano.
Bajamos hasta el siguiente valle para luego descender a nuestra izquierda y buscar la Vereda de los Contrabandistas.
Llegamos a una meseta situada entre el Cerro de los Batanes que vemos al fondo y el Saltadero. La zona es un excelente mirador.
Descendemos por la Vereda de los Contrabandistas en la zona conocida como el Saltadero.
Pasamos por el Portillo de los Contrabandistas.
A nuestra derecha tenemos los cortados del Saltadero.
Detrás vemos los cortados del Algarrobal y el Cerro de los Batanes.
La vereda se convierte en un ancho camino empedrado.
El sol comienza a ocultarse por la Sierra de Las Cabras, en el Parque Natural de Los Alcornocales. Debajo podemos ver Ubrique.
Mas adelante comenzamos a ver Benaocaz y las ruinas del hotel de Aguas Nuevas.
Como siempre, llegamos a lo justo, pero pudimos disfrutar de un bonito atardecer.
Mapa de la ruta:
Perfil de altura y distancia:
Pasamos una buena jornada, a ratos con frío, a ratos con viento e incluso a ratos con calor. Lo de subir y bajar crestas fue lo más durillo, los paisajes y el patrimonio histórico del que disfrutamos lo justificaba con creces. Está claro que ir con gente que comparte la misma idea de un senderismo tranquilo y de disfrute de todo lo que se va viendo, lo hace todo más llevadero. Qué bien pillaste el buitre y que impresionantes los detalles de la Bahía de Algeciras, con barcos y todo. A ver cuando quedamos para la siguiente.
ResponderEliminarBonita ruta. Buenas fotos. No tengo palabras. Saludos.
ResponderEliminarHola Selu, fue un placer disfrutar de tu compañía y de tus conocimientos. Estoy de acuerdo contigo, al campo hay que salir sin prisas, para poder disfrutar de todo lo que nos rodea y no perder detalle. Por eso siempre hay que llevar linternas en la mochila, jeje. Aun nos quedan algunos aljibes.
ResponderEliminarHola Pacorrillo. Gracias por tu opinión.
ResponderEliminarSaludos
Preciosas fotos y ruta. Lastima del estado de algunos pozos. Pero yo tiemblo al escuchar la palabra "restaurar" porque la mayoria de las veces se los "cargan", como ya han hecho con algunos fuentes en esa zona, y el encanto como el gozo; al pozo! Gracias por compartir. Salu2
ResponderEliminarQue lástima que los hijos de nuestros hijos no lleguen a ver esos aljibes tan bellos, ya que posiblemente no se mantengan en pie.Feliz entrada de año a los tres y a los seguidores de tu blog.
ResponderEliminarPues otro ingenio semi-natural-arqueo-hidrológico (vaya palabro me ha salido) que habéis "descubierto" para todos los que nos gusta disfrutar de nuestra sierra. Esta Sierra que no para de darnos satisfacciones en cada rincón que escudriñamos. Pronto os daré a conocer mi última sorpresa serrana.
ResponderEliminarFeliz 2012
Hola Dorita. Tienes razón, hay cada restauración por ahí.... También se a que fuentes te refieres.
ResponderEliminarSaludos.
Hola kiko, me temo que puede ser así. Al menos dejaremos constancia de que estuvieron allí y como lo dejaron desaparecer. Feliz entrada de año a ti y los tuyos.
ResponderEliminarHola Jose Manuel. Ya nos sorprendes continuamente cada vez que publicas algo. Si esta vez nos avisas es que debe ser algo gordo.
ResponderEliminarFeliz 2012
Qué ruta más guapa. Como siempre me asombras con tus itinerarios y fotos. Muchas gracias por tu blog
ResponderEliminarGracias por tu opinión Juan Luis. Saludos.
ResponderEliminarFelicidades por la ruta y por la leccion de "nuestra" historia, aprovecho para felicitaros el nuevo año y que llegue lleno de buenos caminos. Un saludo.
ResponderEliminarMe encantan estos lugares tan naturales y rusticos, para los que somos de ciudad es como si estuvieses en otro planeta.
ResponderEliminarHola, soy Jesús. Enhorabuena y muchas gracias por vuestro fernomenal trabajo.
ResponderEliminarEl día 7-1-2012 hicimos esta ruta, comentarte que el aljibe del Chaparral Bajo esta siendo restaurado, la cúpula y las regueras estan encementadas y hay una hormigonera y materiales. El del Chaparral Alto está arreglado y encalado.
Gracias por la información, Jesús. Habrá que ir de nuevo para verlos. Esperemos que algún día alguien haga lo mismo con el de la Magadalena.
ResponderEliminarSaludos.
Qué buenos recuerdos me trae esta ruta que hice por primera vez con mis amigos Pio y Adrián hace más de 20 años. La última salida que tengo registrada en mi "cuaderno de bitácora", en agosto de 2001, los aljibes estaban llenos en pleno verano... Gracias por enlazar con nuestro blog para el trabajo del amigo Diego Mendoza que es, a mi juicio, el mejor conocedor de todos y cada uno de los rincones de esa sierra... y de sus profundidades. Felicidades por tus brillantes trabajos que nos traen la sierra a casa en cada post. (Selu, a ver si me llevas también a mi...)Agustín G.L.
ResponderEliminarHola Agustín. Tenemos pendiente otra visita a la zona y sería un placer contar con tu compañía.
ResponderEliminarUn abrazo.
Preciosa zona y poco transitada. Felicidades por el blog.
ResponderEliminardmendoza
Gracias dmendoza. Saludos.
ResponderEliminarThe route that you described and showed is very interesting and unusual because, thanks to this description, we can learn everything that you should pay attention to.
ResponderEliminarThanks for your opinion.
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